Familia, trabajo y demás

Llevo unos días que tengo esto un poco abandonado. Aparte del nacimiento de mi sobrinito (muchas gracias a todos por vuestras felicitaciones y buenos deseos), he tenido bastante lío en el trabajo. Ya os conté en otra entrada que el gerente de mi empresa nos había propuesto una reunión para hablar de un posible cambio de horario. Esa reunión tuvo lugar el miércoles por la tarde. Y como ya os imaginaréis no fue demasiado bien pero, al menos, por fin entendí que es lo que quiere de nosotros.

Él quería que le argumentasemos porqué debía reducirnos en una hora la pausa de la comida para que pudiésemos salir antes. Nosotras fuimos con argumentos que nos parecían de peso: motivación del personal, conciliación de la vida personal y laboral, la nueva ley de igualdad, ahorro energético, mejora de la imagen de la empresa... Quisimos persuadirle de que la empresa no iba a salir perjudicada con el cambio e incluso podía salir beneficiada. Pero fuimos demasiado ingenuas. Lo que el señor gerente quiere es que la empresa se beneficie económicamente con el cambio: si los trabajadores mejoran, la empresa también tiene que mejorar en resultados económicos.

La conclusión que saqué yo después de la reunión es que, si queremos que nos cambie el horario, tenemos que trabajar más tiempo. Nuestra jornada es de 36 horas a la semana, 4 horas menos de lo que indica como máximo nuestro convenio y quiere que negociemos con esas 4 horas. No lo indicó explícitamente pero a mí al menos me quedó bastante claro.

Imaginaos el lío que han montado los compañeros. Algunos se han puesto en plan energúmeno, incluso alguien ha mandado un anónimo a casi todo el mundo para poner verde al jefe. Pero, como siempre, nadie se ha ofrecido voluntario para ir a hablar con él o para hacer otras propuestas.

Mi sobrinito sigue igual de guapo. Es buenísimo, no llora, duerme mucho y come bien. Parece increíble que hasta el martes esa cosita enana estuviese dentro de la tripita de su mamá y ahora ya sea parte de la familia y el protagonista de todas las conversaciones y todos los desvelos.

En resumen, que he tenido una semana muy movidita. Este fin de semana espero poder dedicarle más tiempo a este blog que tantas satisfacciones me da, y a los que visito que tanto me gustan.

¡Saludos!